Ya empiezan a cansar esos títulos de los medios virales que pretenden despertar la atención pero que –a estas alturas- acaban siendo repetitivos (del estilo: “Descubre porqué las redes sociales enloquecen con esta foto”). Frases misteriosas o exageradas que simplemente buscan aumentar a toda costa el número de clicks. Pero a eso se le puede dar la vuelta: hace unos meses, una librería de Dallas adaptó los títulos de varias obras literarias a ese estilo “intrigante”, invitando a los lectores a no picar solo en ese anzuelo sino en todo el libro…
Libros
La popularidad de las redes sociales podría sugerir que la gente lee menos libros. La realidad, sin embargo, es que la industria del libro todavía es fuerte, con un valor anual estimado de 123 mil millones de dólares, según datos que reporta este video (1′ 41”) de The Economist.
No pocos ven la expresión “derecho a la vida” como algo opuesto a una causa progresista o feminista. Es una noticia por eso que, según una investigación histórica publicada por la Oxford University Press, se descubra que el movimiento pro life nació en Estados Unidos vinculado a los grupos progresistas demócratas. El no nacido estaba junto al pobre y el débil.
Ignacio Morgado, director del Instituto de Neurociencias de la Universidad Autónoma de Barcelona, afirma en un artículo publicado en El País que (aparte del beneficio por los conocimientos que se adquieren) la lectura de libros supone “un gimnasio asequible y barato para la mente”.